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sábado, 24 de septiembre de 2011

Carta a un amor imposible

Para mi fue una gran sorpresa tu mensaje donde me cuentas el nuevo rumbo de tu vida….

Pero como te dije anteriormente, aunque me duela me alegro por ti y los niños, porque en verdad se merecen ser felices…..

Solo ruego a Dios que esta vez, si te permita lograr una verdadera felicidad donde seas valorada como mujer y como persona en forma honesta y duradera por siempre porque te lo mereces; solo me extraña el enterarme ahora y no tan pronto como se dió, pero, en fin no era tu obligación…….

Que ironías de la vida: Yo no se porqué... pero siempre he sido el que aconseja a todo el mundo sobre el amor. Conozco muchas historias sobre ese tema, ya sea escribiendo, hablando... y tratando de ayudar siempre a los que me lo piden, o sin pedírmelo... yo siempre trato de ayudarlos, igual porque eso me hace bien a mí como persona, me siento bien cuando lo hago sin siquiera conocerlos, solo trato de ayudarlos, porque me pongo en su lugar y sé lo que sienten.

Lo mas curioso es que hoy tengo que decirme a mi mismo todas esas cosas que dije a mis amigos y a otros, y es realmente difícil. Porqué simplemente no tengo con quién hablarlo. Tal vez por orgullo. Y quizás también por vergüenza. Solo tengo a nuestro Padre Celestial para confiárselo y esperar su Divina Voluntad, a fin de cuentas es El quien todo lo decide.

Duele tener que mentir cuándo me preguntan ¿cómo estás? Y decir que me siento muy bien, pero que le vamos a hacer, yo sabía a lo que me exponía y tú siempre fuiste muy honesta conmigo, por eso siempre te he admirado.

Creo que la única forma que me queda es salir de esto sin mentir. No voy a salir a decir que no te amo, porqué no es verdad. Y ya me mentí a mí mismo. Y así me fue. No más mentiras. No más engaños... y que sea lo que Dios quiera.

En fin……………Gracias por todo, no me queda más que agradecerte por comprenderme en cada locura, por cada palabra, por cada momento, por cada abrazo sincero y por sobretodo por ayudarme a atreverme y ser feliz plenamente por unos días.

Gracias por hacerme ver el mundo de otra manera, como te dije una vez sin proponértelo me llenaste la vida de esperanza. 

Fue realmente hermoso sentir en cada fibra de mi piel esa sensación de amarte y por eso, siempre estarás en mi corazón; créeme que como allí nadie puede invadir mi espacio tendrás el mejor lugar de todos porque aunque quise construir mi sueño contigo y no se pudo, debo seguir siempre hacia delante.

No voy a decir que no te extraño. Porqué me muero de ganas de estar a tu lado. No voy a decir que no te necesito. Porqué me haces falta, y tal vez más que nunca. No voy a decir que no quiero llamarte. Porqué cada vez que tengo el teléfono en mi mano mis dedos se van solos como queriendo marcar tu número.

Quiero que sepas, siempre te he deseado lo mejor para ti, y obviamente aunque sea desde la distancia, siempre será así.

Dios te bendiga siempre!!!!!
 

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