LA VIDA ES COMO UN ECO
La mente subconsciente es algo que empieza a funcionar en el momento mismo de la gestación, en el mismo momento en que se unieron el espermatozoide con el óvulo empieza a recibir información parental, información visceral, si una mujer en embarazo se estresa, se estresará también su bebé, eso es señal de que está recibiendo también información parental de su madre.
Hagamos un recorrido mental por nuestra infancia. Como fuimos criados. ¡Bobo, estúpido, dormido, despierta! etc. Cuantas veces los padres cargan a su hijito y con orgullo le dicen al vecino: “Este si va a ser piquiña” “Este si nos va a sacar canas” “Este si va a ser candela” Y lo dicen convencidos de que esas palabras se las lleva el viento. ¡No amigo! Esas palabras están creando programas mentales que se traducirán después en pensamientos, sentimientos, conductas, hábitos, en el carácter que determinará el destino de ese niño que tienes en tus brazos.
Cuantas veces en forma irresponsable aunque de buena voluntad hemos programado y reprogramado mal a nuestros hijos a través de expresiones que aunque son cariñosas son negativas y vulgares. Recuerda siempre que todo lo que sucede en tu vida es el producto de tus pensamientos y tus sentimientos.
Si a ti te está llendo bien muy bien en la vida, ese es el producto de tus pensamientos y tus sentimientos, si te está llendo mal igualmente ese es el producto de tus pensamientos y sentimientos.
Haz una tarea sencilla hoy. Regálate quince minutos con lápiz y papel y escribe en ese papel a manera de título el nombre del área de conflicto en tu vida. ¿Cuál es la piedra en el zapato? Algunos escribirán. Problemas económicos. (No hay dinero que me alcance, siempre estoy sobregirado, siempre estoy en déficit, etc.) Otros dirán; mi problema es mi pareja (mi trabajo va bien, tengo buenos ingresos pero tengo problemas con mi pareja, etc.), otros dirán mi área de conflicto son mi hijos, mi suegra, etc., etc.
Cualquiera que sea su área de conflicto escríbala y después dedíquese a escribir lo que usualmente habla de esa área, por ejemplo en lo económico. Revisa cuales son tus expresiones cuando estás con tus amigos, cuando estás con tu familia, que hablas tú acerca del dinero. ¡Estoy llevado!, ¡estoy quebrado!, ¡estamos en crisis!, ¡no hay billete que alcance!, ¡esto está muy duro!, etc. Te garantizo que lo que estás viviendo es porque tú lo haz creado con tus palabras.
Hagamos un recorrido mental por nuestra infancia. Como fuimos criados. ¡Bobo, estúpido, dormido, despierta! etc. Cuantas veces los padres cargan a su hijito y con orgullo le dicen al vecino: “Este si va a ser piquiña” “Este si nos va a sacar canas” “Este si va a ser candela” Y lo dicen convencidos de que esas palabras se las lleva el viento. ¡No amigo! Esas palabras están creando programas mentales que se traducirán después en pensamientos, sentimientos, conductas, hábitos, en el carácter que determinará el destino de ese niño que tienes en tus brazos.
Cuantas veces en forma irresponsable aunque de buena voluntad hemos programado y reprogramado mal a nuestros hijos a través de expresiones que aunque son cariñosas son negativas y vulgares. Recuerda siempre que todo lo que sucede en tu vida es el producto de tus pensamientos y tus sentimientos.
Si a ti te está llendo bien muy bien en la vida, ese es el producto de tus pensamientos y tus sentimientos, si te está llendo mal igualmente ese es el producto de tus pensamientos y sentimientos.
Haz una tarea sencilla hoy. Regálate quince minutos con lápiz y papel y escribe en ese papel a manera de título el nombre del área de conflicto en tu vida. ¿Cuál es la piedra en el zapato? Algunos escribirán. Problemas económicos. (No hay dinero que me alcance, siempre estoy sobregirado, siempre estoy en déficit, etc.) Otros dirán; mi problema es mi pareja (mi trabajo va bien, tengo buenos ingresos pero tengo problemas con mi pareja, etc.), otros dirán mi área de conflicto son mi hijos, mi suegra, etc., etc.
Cualquiera que sea su área de conflicto escríbala y después dedíquese a escribir lo que usualmente habla de esa área, por ejemplo en lo económico. Revisa cuales son tus expresiones cuando estás con tus amigos, cuando estás con tu familia, que hablas tú acerca del dinero. ¡Estoy llevado!, ¡estoy quebrado!, ¡estamos en crisis!, ¡no hay billete que alcance!, ¡esto está muy duro!, etc. Te garantizo que lo que estás viviendo es porque tú lo haz creado con tus palabras.
¡La vida es como un eco,
si no estás conforme
con lo que estás recibiendo
presta atención a lo que estás emitiendo!
si no estás conforme
con lo que estás recibiendo
presta atención a lo que estás emitiendo!
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Se permite la distribución y copia literal de este artículo en su totalidad y por cualquier medio siempre y cuando se reconozca y cite el autor y la fuente original.
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