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martes, 14 de abril de 2009

EL ARTE DE CONVENCER

Alguien alguna vez dijo que quien convence tiene éxito y quien se deja convencer sirve de escalón para que otros suban hasta la cima, por lo tanto si usted quiere tener éxito debe aprender a convencer.

Que es convencer?
Sencillamente es ponernos al nivel del otro logrando su simpatía y adhesión consolidándola con argumentos lógicos.

Esto implica que antes de acudir a una cita o a una reunión donde haya que convencer a alguien hay que prepararse y esto significa estudiar muy bien el problema que tiene entre manos para encontrarle la solución que se estime más conveniente y articular los argumentos que a su juicio demuestran ser la solución mas acertada.

Recuerde que para todo usted necesita contar con buenos argumentos:
Si quiere vender algo, los necesita. Si quiere negarse a algo, debe argumentar convincentemente porque se niega. Si necesita que otros le ayuden a algo, tiene que dar razones porque deben hacerlo. Si quiere proponer un cambio o medida cualquiera necesitará argumentos para lograr su aprobación; en conclusión en todos los niveles y contextos sus armas siempre serán los argumentos.

Como dije anteriormente, debe prepararlos con anticipación, esmero y cuidado. Estúdielos una y otra vez hasta estar seguro de que son irreprochables. Solo después de esto presénteselos a los demás. No lo haga antes, pues la prisa puede impedir que usted los desarrolle adecuadamente y eso puede desbaratar cualquier argumento por bueno que sea.

Formúlelos con calor y entusiasmo.
Su actitud entusiasta y decidida y decidida constituirá un argumento muy importante. Recuerde que su cuerpo habla por usted, la expresión de sus ojos, su rostro y sus ademanes deben servir para indicar el entusiasmo que usted tiene por la idea y la convicción interior de que lo que está proponiendo es lo mejor. Sin embargo no vaya a exagerar en este campo ya que “demasiado” entusiasmo también puede ser chocante y crear sospechas.

Esté convencido?
Nada de lo anterior dará resultados positivos si usted no está realmente convencido de que su idea o propuesta es lógica y correcta. No podrá convencer honestamente a nadie si a su vez usted no está honestamente convencido de lo que dice.

No tenga prisa.
No trate de convencer en las primeras de cambio. Razone y haga razonar al otro con mucha calma y paciencia; es preferible posponer la continuación del tema para otro día que obtener una negativa por apresurarse y no permitir que sus ideas y argumentos maduren e influyan en su interlocutor.

Utilice un lenguaje claro y ameno:
Sea preciso y claro, llame a las cosas por su nombre y si es del caso utilice ejemplos o imágenes. De esa forma sus argumentos serán mejor entendidos por las personas.

No utilice demasiados argumentos.
No sepulte a los otros con muchos argumentos pues demasiados argumentos complican la situación y abren muchos frentes de discusión.
Estimule al otro para que hable.
Trate de que su interlocutor hable todo lo posible ya que cuanto mas diga será mejor para usted porque podrá identificar su línea central de argumentación, apreciar sus puntos débiles y las dudas que le surjan.

De otro lado si usted no lo deja hablar o solo le permite hacerlo en mínima medida que el estará molesto, reprimido e incluso se podrá sentir herido y eso a usted no le conviene. Al hablar, él reducirá su tensión, se tranquilizará y eso le ubicará en un estado de ánimo para ser convencido.

Presente pruebas.
Siempre trate de demostrar con hechos concretos lo que dice. No se limite a decir “Tal cosa es así” sin probarlo. En lo posible demuestre que realmente es como usted dice pues eso le dará mucho peso a su argumentación.

Un elemento que de ninguna manera hay que descuidar es que muchas personas analizan los hechos y argumentos a la luz de sus propias apreciaciones, deseos y emociones y cuando nuestros argumentos entren en conflicto con sus deseos y emociones, se resistirán a aceptarlos de tal manera que deberemos ser muy cuidadosos en este terreno procurando que nuestros planteamientos no choquen frontalmente con sus sentimientos.

Convencer es vital para lograr el éxito de modo que desde ya los invito a colocar en práctica día a día estos pasos a fin de facilitar nuestro camino hacia la cima.
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